miércoles, 1 de diciembre de 2010

Donde estemos

La oscuridad inunda mi alma, miedo, desconcierto ante lo desconocido, noche sin estrellas, el cantar de un ave nocturna en la oscuridad. Tú te acercas, místico y sigiloso. Noto tu presencia demasiado pronto, nuevamente no logras sorprenderme. Me susurras al oído palabras que solo yo comprendería. Te esperaba, sabía que me encontrarías, siempre lo has hecho, siempre lo harás. Me giro hacia tí y permaneces quieto, sin decir palabra, solo tú, yo y nuestras miradas, en un mundo que llevas años creando para los dos. Sonrío y me acerco. Ya no hay miedo, ya todo es conocido, ya vuelves a estar conmigo. Extiendo los brazos hasta tí con el miedo contenido a no poder tocarte, el pavor desaparece nuevamente cuando siento tu calidez. Sonrío.
-No temas -me dices -en el mundo de los muertos también existe el amor.

No hay comentarios:

Publicar un comentario